Fiel a su barrio de Villa Urquiza, Guillermo Guerrero, además de dibujar a Lúpin para su revista “Pinlu”, lo hacía para el periódico “El Barrio”, que dirige Marcelo Benini. La última historieta –con una temática que es todo un símbolo- llegó al periódico después de su muerte… Pero leamos directamente el testimonio de Benini:
Guerrero trabajó hasta el último día de su vida. La muerte ni siquiera evitó que dejara lista la tira que mensualmente publicaba en este periódico. Su viuda nos entregó el original algunos días después de su desaparición física. Tenìa escrito en lápiz la frase Hablar Benini. Sucede que todos los meses, por lo general los sábados a la mañana, el creador de Lúpin me llamaba a casa. “Hola Marcelo, habla Guerrero. Ya tengo lista la historieta”, era su invariable mensaje. Esta vez no alcanzó a comunicarse, pero sí a terminar el trabajo. Quienes hacemos EL BARRIO sentimos mucho su pérdida.
Guerrero trabajó hasta el último día de su vida. La muerte ni siquiera evitó que dejara lista la tira que mensualmente publicaba en este periódico. Su viuda nos entregó el original algunos días después de su desaparición física. Tenìa escrito en lápiz la frase Hablar Benini. Sucede que todos los meses, por lo general los sábados a la mañana, el creador de Lúpin me llamaba a casa. “Hola Marcelo, habla Guerrero. Ya tengo lista la historieta”, era su invariable mensaje. Esta vez no alcanzó a comunicarse, pero sí a terminar el trabajo. Quienes hacemos EL BARRIO sentimos mucho su pérdida.
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