La aparición de una nueva revista de humor siempre ha sido en primera instancia, un hecho auspicioso.
El que una revista humorística nacida conjuntamente con el Justicialismo, sea reeditada 65 años después con los mismos bríos, a pesar de sus 91 años (o tal vez por ellos) por quien fuera su creador, es ya un acontecimiento.
Un acontecimiento al que todos pueden acceder, y que sería una lástima que algunos no lo aprovecharan.
Los comentarios de los primeros privilegiados en hojear estas páginas son más que elocuentes:
“Felicitaciones por la idea, hacía falta…”
“Estuve leyendo la revista anoche y me la devoré. Es muy buena. Sigan así…”
“Estimado Lubrano: Los que amamos la historieta nos sentimos felices por la vuelta de Don Yacumín. Espero que sea un éxito esta nueva etapa de la revista y que Ud. Siga tan creativo como siempre…”
Como historiador del humor, admito no tener antecedentes de otra situación similar o parecida a lo largo de los 200 años de la Argentina. Al mismo tiempo me regocijo como humorista gráfico ante la edición de una nueva revista humorística en papel en este siglo XXI considerado por no pocos, la tumba tecnológica de esa clase de publicaciones.
Como historiador del humor tendré algo inédito realmente importante para referir y comentar en la continuación de mi Historia cubierta hasta ahora desde 1801 hasta 1985, pero estoy convencido que como humorista veré reaparecer ese mismo entusiasmo y adhesión popular que a su turno cosecharon revistas como “Caras y Caretas”, “PBT”, “Patoruzú”, “Rico Tipo”, “Tía Vicenta”, “Satiricón” y tantas otras… y por supuesto aquella revista “Descamisada” de 1946, que ahora vuelve de la mano de su creador, al que auguro el mayor de los éxitos.
El que una revista humorística nacida conjuntamente con el Justicialismo, sea reeditada 65 años después con los mismos bríos, a pesar de sus 91 años (o tal vez por ellos) por quien fuera su creador, es ya un acontecimiento.
Un acontecimiento al que todos pueden acceder, y que sería una lástima que algunos no lo aprovecharan.
Los comentarios de los primeros privilegiados en hojear estas páginas son más que elocuentes:
“Felicitaciones por la idea, hacía falta…”
“Estuve leyendo la revista anoche y me la devoré. Es muy buena. Sigan así…”
“Estimado Lubrano: Los que amamos la historieta nos sentimos felices por la vuelta de Don Yacumín. Espero que sea un éxito esta nueva etapa de la revista y que Ud. Siga tan creativo como siempre…”
Como historiador del humor, admito no tener antecedentes de otra situación similar o parecida a lo largo de los 200 años de la Argentina. Al mismo tiempo me regocijo como humorista gráfico ante la edición de una nueva revista humorística en papel en este siglo XXI considerado por no pocos, la tumba tecnológica de esa clase de publicaciones.
Como historiador del humor tendré algo inédito realmente importante para referir y comentar en la continuación de mi Historia cubierta hasta ahora desde 1801 hasta 1985, pero estoy convencido que como humorista veré reaparecer ese mismo entusiasmo y adhesión popular que a su turno cosecharon revistas como “Caras y Caretas”, “PBT”, “Patoruzú”, “Rico Tipo”, “Tía Vicenta”, “Satiricón” y tantas otras… y por supuesto aquella revista “Descamisada” de 1946, que ahora vuelve de la mano de su creador, al que auguro el mayor de los éxitos.
Y otra feliz noticia: desde este momento "Descamisada" circula en toda la República Argentina!
Oscar Vázquez Lucio (Siulnas)
Correo electrónico para ponerse en contacto con Germinal Lubrano:
Descamisada2010@hotmail.es
Oscar Vázquez Lucio (Siulnas)
Correo electrónico para ponerse en contacto con Germinal Lubrano:
Descamisada2010@hotmail.es
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