Oesterheld debutó en el periodismo a los 18 años, con un cuento para chicos que publicó en el diario “La Prensa”; tiempo después tiene la posibilidad de colaborar simultáneamente en las editoriales Codex y Abril con trabajos de divulgación científica y cuentos infantiles. Con estos últimos colaboró en la colección Bolsillitos y en la revista “Gatito”, donde al personaje central sumó la creación de todos los que lo secundaban: el Ogro Rompococo, Perrito Doctor, la Princesa Tilina, y el Ratón Gorgonzola.
También en Editorial Abril, comienza a escribir guiones para historietas de aventuras; lo hace inicialmente en “Misterix”, con Alan y Crazy, ilustrada por Zoppi; sigue con una de guerra, Lord Commando, y una policial, Ray Kitt, dibujada por Pratt.
Hasta que llegó Bull Rockett, que desde Italia ilustraba Campani, y posteriormente el Indio Suárez, dibujada inicialmente por Carlos Freixas, publicada en “Rayo Rojo”.
Después vendría el Sargento Kirk, dibujado por Pratt, hasta que Oesterheld decide tener su propia editorial, surgiendo “Hora Cero” y “Frontera”, con un desfile de nuevos personajes hasta el surgimiento de El Eternauta, que dibujada por Solano López, marca un antes y un después en la historieta argentina (actualmente se está republicando en forma de tira diaria en el matutino “Tiempo Argentino”).
Pero no es el propósito de esta evocación, hacer un currículum vitae ni una biografía de Oesterheld; sólo intento familiarizar un poco más a las generaciones más jóvenes de las tres últimas décadas, con este representante de la historieta argentina, hoy casi convertido en un ser mítico.
También en Editorial Abril, comienza a escribir guiones para historietas de aventuras; lo hace inicialmente en “Misterix”, con Alan y Crazy, ilustrada por Zoppi; sigue con una de guerra, Lord Commando, y una policial, Ray Kitt, dibujada por Pratt.
Hasta que llegó Bull Rockett, que desde Italia ilustraba Campani, y posteriormente el Indio Suárez, dibujada inicialmente por Carlos Freixas, publicada en “Rayo Rojo”.
Después vendría el Sargento Kirk, dibujado por Pratt, hasta que Oesterheld decide tener su propia editorial, surgiendo “Hora Cero” y “Frontera”, con un desfile de nuevos personajes hasta el surgimiento de El Eternauta, que dibujada por Solano López, marca un antes y un después en la historieta argentina (actualmente se está republicando en forma de tira diaria en el matutino “Tiempo Argentino”).
Pero no es el propósito de esta evocación, hacer un currículum vitae ni una biografía de Oesterheld; sólo intento familiarizar un poco más a las generaciones más jóvenes de las tres últimas décadas, con este representante de la historieta argentina, hoy casi convertido en un ser mítico.
Siulnas
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